"En 1985, cuando Nelson
Mandela llevaba veintitrés años en prisión, se propuso conquistar a sus
enemigos, los más fervientes defensores del apartheid. Así obtuvo su libertad y
consiguió convertirse en presidente.
Pero la inestabilidad de un
país dividido por cincuenta años de odio racial cristalizó en la amenaza de una
guerra civil. Mandela comprendió que tenía que conseguir la unión de blancos y
negros de forma espontánea y emocional, y vio con claridad que el deporte era
una estrategia extraordinaria para lograrlo. John Carlin ha descubierto el
factor humano que hizo posible un milagro: la capacidad innata de Mandela para
seducir al oponente y su tenaz deliberación de utilizar el mundial de rugby de
1995 para sellar la paz y cambiar el curso de la Historia. La final de aquel
mundial culminó con la victoria sudafricana en el último minuto, y fundió en un
abrazo a negros y blancos en el ejemplo más inspirador que ha visto la
humanidad." (Reseña del libro "El factor humano", de John
Carlin)
La nueva
película de Clint Eastwood me ha parecido memorable. Y no quisiera resultar
monotemática, pero la figura de Mandela se me ha presentado muy de estilo
'coach'.
Me quedo
con este fragmento del poema de W. E. Henley:
"Doy
gracias al dios que fuere
por mi
alma inconquistable.
Soy el
dueño de mi destino,
soy el
capitan de mi alma."
Os la
recomiendo, una delicia.
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